Home Agujeros negros ¿Qué pasa si me caigo en un agujero negro?

¿Qué pasa si me caigo en un agujero negro?

by Jordi Pereyra

Los agujeros negros traen a todo el mundo de cabeza, y no es para menos. Las leyes de la física no nos sirven para describir lo que ocurre en el centro de estos cuerpos infinitamente densos y pequeños, así que es normal que mucha gente se pregunte qué nos pasaría si se nos ocurriera acercarnos demasiado a alguno de ellos. Al fin y al cabo, ¿de qué macabra manera podría terminar con nuestra vida algo que lleva al extremo las leyes de la física?

Vamos a repasar la «anatomía» de un agujero negro antes de abordar la cuestión.

Como comentaba en esta otra entrada sobre el choque entre dos agujeros negros, para que un agujero negro te arrastre hacia su interior sin remedio tienes que acercarte mucho a él. Es decir, que esa imagen Hollywoodiense de que, nada más entrar en su dominio gravitatorio, un agujero negro te absorberá como una aspiradora sin que puedas hacer nada para evitarlo  no tiene ningún sentido.

En realidad lo que pasa es que cuando estás en medio del espacio se puede considerar que el campo gravitatorio de cualquier objeto que esté tirando de ti proviene de un punto en su centro. Cuanto más te acerques a este punto, mayor será la fuerza gravitatoria que notarás. Pero, claro, normalmente la superficie de cualquier objeto te impide acercarte tanto como quieras a ese foco de gravedad. Es decir, que la máxima distancia que podrás acercarte a ese punto será la que te permita la superficie del planeta, satélite o lo que sea sobre lo que quieras ponerte de pie.

Pero los agujeros negros tienen masas tremendas concentradas en volúmenes diminutos. Una masa equivalente a la de una estrella puede estar concentrada en un punto minúsculo y es por eso que podemos experimentar una fuerza gravitatoria brutal cerca de un agujero negro: si comprimimos toda la masa de una estrella en un volumen tan pequeño, el campo gravitatorio que generará será el mismo, pero ya no habrá una superficie que nos impida acercarnos tanto como queramos al «foco» de la gravedad.

De hecho, la intensidad de la gravedad aumenta tanto cerca de ese foco que existe una distancia alrededor del agujero negro a partir de la cual ni siquiera la luz puede escapar de ella. Este es el llamado horizonte de sucesos que, de hecho, es lo que realmente aparece representado en la forma de un disco oscuro en las imágenes de agujeros negros.

(Fuente)

Nada que se encuentre más allá del horizonte de sucesos puede escapar del agujero negro: ni la luz, ni cualquier otro tipo de onda electromagnética. Es por eso que no tenemos manera de recibir información sobre la singularidad, el punto en el interior del agujero negro en el que se encuentra concentrada toda su masa.

Ahora que más o menos sabemos de qué va el tema, empecemos suponiendo que por casualidades de la vida terminas precipitándote de cabeza hacia el interior de un agujero negro.

Como ser vivo que eres puedes presumir de poseer un cuerpo y, por tanto, de tener volumen y masa… Algo que no es muy deseable cuando te precipitas hacia el interior un agujero negro porque será la causa de que sufras un fenómeno bastante desagradable: la espaguetización.

La intensidad de un campo gravitatorio aumenta según el cuadrado de la distancia a medida que te acerques al cuerpo que lo origina. La consecuencia de esto es que, en las inmediaciones de un agujero negro, acercarte sólo un poco más a él puede suponer una gran diferencia en la intensidad de la fuerza gravitatoria a la que vas a estar sometido. Es por eso que mientras te acercas al agujero negro el gradiente gravitatorio se vuelve tan intenso incluso a distancias cortas que llega un punto en el que la fuerza que tira de un extremo de tu cuerpo se vuelve mucho mayor que la que tira del otro.

Dicho de otra manera, llegará un momento en el que tu cabeza será atraída hacia el agujero negro con una fuerza mucho mayor que tus pies. El resultado: la gravedad te estirará en la dirección de la caída con una fuerza cada vez mayor y serás aplastado por los lados hasta que, eventualmente, termines convertido en un fino hilo de materia. De ahí que los astrónomos se refieran a este proceso como «espaguetización».

Pero, Ciencia de Sofá, ¿podríamos sobrevivir a la espaguet…? No, no, es broma, continúa.

Qué chipa, voz cursiva. Pero, en realidad, aunque no tiene pinta de ser una manera muy agradable de morir, podemos consolarnos con este pensamiento: la teoría de la relatividad evitará que nuestros seres queridos presencien este desagradable espectáculo desde fuera.

Como ya había comentado en esta otra entrada sobre la película Interstellar (ojo, spoilers), cuando alguien está metido en un campo gravitatorio mucho más fuerte que otra persona, entonces el ritmo al que pasa el tiempo para ambos respecto al otro es distinto. Si, por ejemplo, ahora os mismo te metieras en una nave y fueras a dar vueltas alrededor de un agujero negro durante un año, dependiendo de a qué distancia de él lo hicieras, al volver a casa te encontrarías con que en la Tierra habría mucho más tiempo que el año que marca tu calendario. 5, 10, 100 años… Todo dependería de cuánto te atrevieras a acercarte al monstruo.

Esto significa que una persona que pudiera ver desde una distancia segura cómo eres arrastrado hacia un agujero negro vería cómo te mueves a «cámara lenta», cada vez más despacio cuanto mayor fuera la intensidad gravitatoria que actúa sobre ti. En otras palabras, si llevaras un reloj gigante atado a la espalda mientras caes hacia el interior de un agujero negro, un observador externo vería cómo sus agujas se irían moviendo cada vez más despacio hasta que, al llegar al horizonte de sucesos, donde la velocidad necesaria para escapar es la misma que la de la luz, las vería detenerse por completo. Y, de ahí en adelante, cualquiera que pase cerca del agujero negro te verá ahí paralizado y espaguetificado, como un monumento eterno dedicado a la gente a la que le da por hacer cosas absurdas.

Esperad, mejor no os creáis del todo esto último. La verdad con esta viñeta me he flipado un poco para poder meter una gracia.

Aunque sí que quedaría tu imagen paralizada para siempre en el límite del agujero negro, en realidad desde fuera no te verían eternamente congelado en el momento anterior a tu paso a través del horizonte de sucesos. Esto se debe a que mientras un objeto se acerca hacia el agujero negro una cantidad de luz cada vez menor consigue escapar hacia el espacio. Esto se traduce en que, desde fuera, la luminosidad del objeto irá disminuyendo mientras cae hacia un agujero negro porque cada vez una mayor cantidad de luz es absorbida por él. Al llegar al horizonte de sucesos, toda la luz queda capturada. O sea que, en realidad, mientras caes hacia el agujero negro un observador externo vería cómo te vas oscureciendo cada vez más mientras te estiras y ralentizas a medida que te acercaras al horizonte de sucesos… Hasta que llegue un punto en el que toda la luz reflejada por tu cuerpo es absorbida por el agujero negro y desaparecerás de su vista.

Curiosamente, desde fuera también verán cómo adoptas una tonalidad rojiza a medida que te oscureces debido a que la intensa gravedad «estiraría» las ondas de luz que salen de tu cuerpo, haciendo su longitud de onda más larga.

Un momento pero, ¿cómo de espaguetificado podrías llegar hasta un agujero negro? Quiero decir, ¿podrías llegar hasta horizonte de sucesos en un estado más o menos reconocible o serías simplemente un cordón de materia amorfa?

Buena pregunta, voz cursiva, porque aquí hay que hacer una distinción: según la masa del agujero negro en el que te metas, te podrían llegar a ver cruzar el horizonte de sucesos con vida.

Hasta ahora he estado suponiendo que hablamos de un agujero negro con una masa pequeña (del orden de unas 30 veces la del sol, como mucho), de los que se forman durante la explosión de una estrella. Pero existe otra clase de agujeros negros que se encuentran en el centro de las galaxias, los agujeros negros súpermasivos, que pueden contener en su interior la masa equivalente a miles de millones de estrellas. Estos agujeros negros son muy masivos pero tan grandes que, proporcionalmente, son menos densos que los agujeros negros pequeños.

Es por eso que, mientras gravedad de un agujero negro pequeño podría destrozarte mucho antes de que llegaras a tocar el horizonte de sucesos, la fuerza gravitatoria de un agujero negro súpermasivo no sería suficientemente intensa como para hacer lo mismo hasta que te encontraras en su interior.

Me hubiera gustado haber podido calcular a qué distancia de un agujero negro se produciría la «muerte por espaguetización», pero no he encontrado ningún dato que ofrezca la resistencia global del cuerpo humano a la tracción. Nos tendremos que conformar con un ejemplo de Wikipedia en el que se explica que una cuerda de 1 metro de longitud capaz de resistir 10.000 N (el peso ejercido por unos 1.000 kg a nivel del mar en la Tierra) se rompería a una distancia de unos 320 kilómetros de la singularidad de un agujero negro de 10 masas solares, que tiene unos 30 kilómetros de diámetro. O sea, mucho antes de llegar al horizonte de sucesos. En cambio, en un agujero negro de 10.000 masas solares la cuerda no se rompería hasta encontrarse a una distancia de 3.200 kilómetros de la singularidad, siendo el diámetro del horizonte de sucesos de unos 30.000 kilómetros.

O sea, que cerca de un agujero negro pequeño mis amigos me verían convertido en una angula justo antes de desaparecer de su vista, pero si cayera en un agujero negro súpermasivo me podrían ver cruzar el horizonte de sucesos de una pieza.

Correcto, VC.

Poh balla.

Llegados a este punto, ya hemos cubierto lo que verían los demás al verte caer por un agujero negro. Pero, ¿qué verías tú? Resulta que desde tu punto de vista no quedarías suspendido en el limbo del tiempo para siempre.

Desde tu perspectiva, verías tu reloj de pulsera seguiría funcionando al ritmo normal mientras te acercaras hacia el agujero negro y cruzaras el horizonte de sucesos. Supondremos ahora que estás hecho de un material indestructible que te permite adentrarte en las profundidades del agujero negro sin ser espaguetizado. ¿Qué experimentarías al acercarte a un agujero negro y cruzar el horizonte de sucesos?

En esta página web de la Universidad de Colorado lo explican muy bien. Y han hecho un vídeo que os ayudará a visualizar el proceso mucho mejor.

A medida que te acercaras hacia el agujero negro verías la luz del cielo deformada por la gravedad por encima de ti volviéndose cada vez más y más brillante. El brillo de las estrellas y las galaxias parecería aumentar cada vez más debido a que la gravedad estaría reduciendo la longitud de onda de toda la radiación electromagnética que llega hacia ti, haciendo visibles muchas cosas invisibles como la radiación infrarroja o la radiación de fondo de microondas.

Pero, al atravesar el horizonte de sucesos, la cosa cambiaría.

A primera vista da la impresión de que si echaras la vista hacia atrás después de atravesar el horizonte de sucesos deberías ver algo parecido a la caída a través de un túnel: el universo formando un círculo que iría menguando a medida que te adentraras en las profundidades del agujero negro. Pero esto no es correcto porque un agujero negro no es un agujero de verdad.

En realidad, seguiríamos viendo el agujero negro bajo nuestros pies como si no hubiera pasado nada porque, recordemos, el horizonte de sucesos es sólo una zona a partir de la cual la luz no puede salir, pero sigue entrando de todas maneras. Un fenómeno extraño tendría lugar en este momento: el horizonte quedaría dividido en dos. Bueno, no dividido, más bien aparecería un segundo horizonte, un anti-horizonte, un fenómeno ilusorio que serían las remanentes de la luz que había sido generada durante la explosión de la estrella que creó el agujero negro, pero extremadamente desplazada hacia el rojo.

Más allá del horizonte de sucesos, la fuerza gravitatoria es muchísimo más intensa y nuestra imagen del cielo cambiaría. La luz parecería más azulada en el «horizonte» que por encima de él, donde tendría una tonalidad más rojiza. De nuevo, la gravedad sería la responsable de este fenómeno, ya que en los lugares más cercanos a la singularidad (debajo de nosotros) la longitud de onda de la luz estaría siendo reducida, volviéndola más azulada.

(Fuente)

Y este sería el paisaje que te tocaría mirar hasta alcanzar la singularidad central. El tiempo que tardarías en llegar hasta ella dependería de la masa del agujero negro a través del cual hubieras saltado. Tardarías unos segundos en alcanzarla en un agujero negro pequeño, de unas pocas masas solares, pero podrías llegar a pasar horas viajando tras el horizonte de sucesos hasta alcanzar la singularidad central de un inmenso agujero negro súpermasivo.

Y después de esto, se acabó lo que se daba. Tu viaje terminaría bruscamente sin que te encontraras en ningún momento cara a cara con la singularidad central porque en realidad esa singularidad no es un punto en el espacio que puedas señalar con el dedo. Es un lugar donde las leyes de la física fallan, así que no podemos saber con seguridad qué es lo que pasa ahí dentro pero, como dicen en el artículo de la Universidad de Colorado, la singularidad sería «una frontera tridimensional donde la teoría de la relatividad general se suicida«.

Si no hubiéramos supuesto que te habías vuelto indestructible, a estas alturas ya hace rato que estarías espaguetificado y muerto. De todas maneras, suponiendo que fueras muy fuerte, pero no indestructible, serías desintegrado justo una décima de segundo antes de alcanzar la singularidad central del agujero negro.

Esta última parte del artículo puede sonar un poco extraña en texto, de manera que recomiendo que veáis el vídeo que os he comentado antes. Está en inglés, eso sí. Y aquí termino bruscamente la entrada: espero haberos convencido de que meterse en un agujero negro no es muy buena idea.

Por cierto, ¿sabéis qué es capaz de atraeros con más fuerza que un agujero negro y tiene la ventaja de que no os va a espaguetizar? El precio del libro que…

Otra vez no, por favor… 🙁

 

34 comments

34 comments

alfonso julio 26, 2015 - 9:15 pm

BRAVO!!!

Reply
Lluc Coll julio 26, 2015 - 9:49 pm

Hola Jordi, muy interesante el artículo, como siempre 🙂

Mientras lo iba leyendo se me han ocurrido un par de reflexiones que igual son una burrada, pero me gustaría exponerlas por si alguien me las puede aclarar.

La primera es respecto al hecho tan mencionado de que la densidad en un agujero negro es infinita. Yo diría que no es así pues, al menos matemáticamente, toda la materia que compone el agujero debería ocupar un volumen 0, y ,por poco que ocupe, nunca sera 0 ya que las partículas elementales algo de volumen tienen. Está claro que tiene una densidad inimaginablemente grande, pero no infinita, con lo cual no estoy tan convencido de que las consecuencias sobre el espacio-tiempo sean como si nos encontrásemos en la cota.

La segunda va sobre lo que comentas que según el tipo de agujero negro, nuestra espaguetización se produciría en diferentes momentos relativamente hablando con respecto al horizonte de sucesos. Aquí mi reflexión es que, si no lo entiendo mal, el horizonte de sucesos es función de la gravedad del agujero, del mismo modo que lo es la distancia a la que se espaguetizaría el cuerpo. Es decir, entiendo que, en relación al horizonte de sucesos, la espaguetización debería producirse siempre en el mismo punto relativo.

Pues ahí dejo eso 😉 Como he dicho, disculpad si son una burrada
Saludos

Reply
Unai Usin julio 26, 2015 - 11:16 pm

En el vídeo de la Universidad de Colorado, la representación del agujero negro en el minuto 1:20 +/- es clavada a la de Interestelar 🙂
Muy buen artículo como siempre.

Reply
iñaki julio 27, 2015 - 4:45 am

Gracias por el artículo. Muy interesante.

Reply
Námsel julio 27, 2015 - 6:26 am

¿Por qué no puede escapar ni la luz pero según la radiación Hawking sí hay partículas que escapan haciendo que el agujero negro vaya perdiendo materia (y energía) con el paso del tiempo?
¿De dónde sacan esa fuerza como para salir? ¿O es que nunca terminan de estar dentro?

Hay agujeros negros que expulsan «chorros» de material a incluso años luz de distancia. ¿Cómo puede convivir ese hecho con la gravedad infinita?

Reply
Andrés de Buen octubre 23, 2015 - 8:24 am

Bien,la gravedad es gigantesca pero no infinita. Sobre la radiación de Hawking, no sabría decirte mucho. Pero sobre los chorros que expulsan en los polos, checa el artículo de esta página que está referido a los quásars: «¿Qué es un quásar?»
https://cienciadesofa.com/2013/07/respuestas-xvii-quasares.html
…es básicamente un hoyo negro que absorbe mucha luz. EL hoyo negro rota sobre su eje. la luz que absorbe también.

Reply
anavalphoto febrero 15, 2017 - 7:09 pm

se llaman agujeros blancos

Reply
francisco julio 27, 2015 - 9:51 pm

«si comprimimos toda la masa de una estrella en un volumen tan pequeño, el campo gravitatorio que generará será el mismo, pero ya no habrá una superficie que nos impida acercarnos tanto como queramos al “foco” de la gravedad» este párrafo está mal. La gravedad de un objeto está dado por la atraccion de la materia, en una estrella no puede haber la misma gravedad que en un agujero negro de la misma masa, porque si pudieramos entrar en una estrella la masa que esta entre ti y la superficie tiraria hacia afuera y eso lo explicaste vos en otra publicacion (no recuerdo cual)

Reply
Andrés de Buen octubre 23, 2015 - 8:16 am

De hecho el párrafo está bien. Solo que la interpretación es donde puedan diferir los significados. El autor se refiere a que si tenemos un agujero negro de masa «m» y una estrella de masa «m» (ojo, hablo de masa, no volumen) ambos «generarán» la misma fuerza gravitacional. La diferencia es que un agujero negro es muchísimo más chico que la estrella, por lo que sentiríamos muchísima mayor gravedad en la superficie del hoyo negro de volumen chico (estamos parados más cerca del centro gravitacional), que en la superficie de la estrella de volumen grande (estamos parados mucho más lejos del centro gravitacional), Ambos, al tener la misma masa, generan la misma fuerza gravitacional.
Dicho de otra forma, si fueras indestructible y pudieras traspasar materia, la fuerza gravitacional que experimentes sería la misma en el hoyo negro o la estrella (de masas idénticas) ya que esa fuerza gravitacional solo dependerá de la distancia a la que te encuentres del centro de gravedad.
¡Espero te haya servido!

Reply
Luis septiembre 6, 2016 - 10:35 pm

De acuerdo contigo, Andrés, excepto el último párrafo. Al entrar a un cuerpo la intensidad gravitatoria va bajando a 0 según te acercas al centro. Esto es porque, una vez dentro, ya no puedes suponer que el total de la masa de la estrella se concentra en el centro de la misma.

Reply
Andrés diciembre 10, 2018 - 6:53 am

Luis, tienes toda la razón. Al entrar a un cuerpo, la masa que vas dejando atrás tiraría de ti también, por lo que la fuerza gravitacional se reduciría, hasta que en el punto infinitesimalmente central, la gravedad tiraría de todos lados y estaría en un equilibrio de fuerzas. Aunque seguramente deberías de ser infinitamente pequeño para tener ese efecto de cero gravedad en el centro de un cuerpo sólido gigantesco.

Podría estar equivocado, pero gracias por la nota Luis.

Reply
Verdecillo julio 28, 2015 - 2:49 pm

QUE PUTA PASADA, así sin más.

Reply
luiggi88Luiggi julio 28, 2015 - 5:26 pm

Ando flojo con el inglés, y segurmo muchos otros también… no pude encontrar un link del video que tenga subtitulos, es muuucha molestia pedirte que consigas/hagas/esclavices a alguien para haga una version con subtitulos? :v

Reply
Juan Carlos julio 29, 2015 - 2:24 pm

Hola Jordi, hay una cosa que no me cuadra, aunque mi asimilación del artículo se basa en la «lógica a imple vista» y no en la física, así que puedo estar más que equivocado 🙂
Comentas que dentro del horizonte de sucesos seguiríamos viendo la singularidad ya que la luz no puede salir, pero sí puede entrar. Sin embargo, cuando nosotros vemos un objeto, no vemos la luz que le llega a él, sino la luz que se refleja en él y por lo tanto se escapa. Cómo sería posible que un fotón que llega a la singularidad saliera reflejado hacia los ojos del observador, si la fuerza gravitatoria sería ahí todavía más intensa que en el horizonte de sucesos?
Lo mismo es una pregunta chorra, pero me corroe la duda, y yo no tengo voz cursiva cerca a la que preguntar 🙂

Reply
Jordi Pereyra julio 29, 2015 - 7:38 pm

Buena pregunta, Juan Carlos. En el vídeo de la simulación se puede ver mejor: si te fijas, al atravesar el horizonte de sucesos debajo de ti queda una «superficie» negra que se extiende hasta un horizonte y ahí, al final, se puede ver la luz de las estrellas. O sea, que no está saliendo luz en dirección contraria a la singularidad, porque de lo contrario verías la «superficie» que hay debajo de ti iluminada.

En realidad, cuando un rayo de luz entra en un agujero negro no desvía su trayectoria y va directo hacia la singularidad, sino que normalmente quedará atrapado en una órbita a su alrededor que va disminuyendo su radio rápidamente, acercándose cada vez más al agujero negro hasta que el rayo de luz desaparece en la singularidad. Esa es la luz que puedes ver en el interior del horizonte de sucesos: la que te llega «de frente» debido a que está dando vueltas alrededor de la singularidad antes de caer en ella. ¿Ha ayudado en algo esta explicación?

Reply
Juan Carlos julio 29, 2015 - 8:16 pm

Muchísimas gracias! Ahora sí que veo clara la luz (suena a perogrullada, eh?) que podría percibir dentro del horizonte de sucesos. No se ve la singularidad en sí, sino luces que entran al horizonte de elementos externos en su viaje hacia la singularidad en la órbita que comentas. Perfectamente explicado!

Reply
icabot julio 31, 2015 - 10:21 pm

Por lo que leo, en un agujero negro supermasivo, podríamos cruzar el horzonte de sucesos sin problemas, dado que la distancia con la singularidad, al ser mayor, no nos estiraría hasta matarnos. No eniendo cómo, en una zona donde la luz no puede escapar debido a la gravedad podríamos seguir vivos sufriendo la misma gravedad.
Por otro lado, si la gravedad disminuye en relación al cuadrado de la distancia, y en la singularidad es infinita, en qué punto deja de ser infinita?
Sí, no soy físico, sólo aficionado.

Reply
Jordi Pereyra agosto 1, 2015 - 7:01 am

Piensa que lo que te mata no es la intensidad de fuerza gravitatoria en sí, sino la diferencia entre la fuerza que notas entre la cabeza y los pies. Por tanto, en un agujero negro súpermasivo puedes encontrarte en una zona con una intensidad gravitatoria inmensa que no permita escapar a la luz (el horizonte de sucesos), pero en la que no haya una diferencia de fuerza significativa entre tus pies y tu cabeza. El resultado será que simplemente te verás acelerado hacia la singularidad más deprisa, en vez de ser estirado.

En cuanto a lo de la infinitud, no sabría ahora mismo qué responderte. Aunque sabemos muchas cosas sobre los agujeros negros, la singularidad en sí es un misterio y es complicado poder decir algo sobre ellas con seguridad.

Reply
nadie julio 31, 2015 - 10:45 pm

Hola, yo tengo dos preguntas.

1ª. Has explicado que por efecto de la intensa gravedad, la masa de los cuerpos sufre la «espaguetización». ¿Podría este mismo fenómeno impedir que una persona vea sus propias manos si las extiende hacia el interior del agujero? ¿No impediría esta fuerza gravitatoria que la luz «fluyera» hacia el exterior siempre; aunque la luz no venga exactamente del punto en el que se encuentra la singularidad sino de nuestras propias manos?

2ª. Me interesa mucho la percepción del tiempo cuando nos aproximamos a objetos supermasivos como estos agujeros negros. Has explicado que una persona que se introduce en un agujero negro, si no he entendido mal, percibiría cambios en la tonalidad de la luz debido a cómo influye la gravedad en las hondas electromagnéticas. Mi pregunta es ¿cómo influiría su percepción del tiempo en las imágenes que se perciben del exterior del agujero? ¿No se vería un universo «acelerado»? ¿no se percibiría una especie de explosión lumínica por la condensación de toda la luz emitida por todos los objetos luminosos del exterior durante lo que en el exterior habrían sido largos periodos de tiempo? Creo que al igual que desde el exterior se ve que una persona que se introduce en un agujero negro se paraliza hasta desaparecer quizás desde el interior debería producirse el fenómeno opuesto: percibir que en el exterior se acelera todo hasta que ese espacio oscuro con muchos puntos luminosos se convierta en un cielo completamente luminoso.

Muchas gracias por todo. Me encanta tu blog porque consigue explicar con bastante rigor cosas con las que otros sólo podemos especular.

Reply
nadie julio 31, 2015 - 10:48 pm

Quería poner que donde he escrito «hondas electromagnéticas» quería haber puesto «ondas electromagnéticas». Cosas del directo 🙂

Reply
Puri agosto 4, 2015 - 10:31 pm

Hola! Grandísima entrada, como siempre! Yo tengo una pregunta: por qué laz leyes de la física no funcionan al hablar de la singularidad? Por qué se dice que la relatividad general se suicida allí? Podrías explicarlo un poco o recomendar alguna lectura?

Muchísimas gracias!

Reply
Fernando Navarro. agosto 5, 2015 - 5:13 am

Primero me encantó tu blog, felicidades, y en segunda, creo que está mal llamar deformidad del espacio y tiempo a un agujero negro, ya que enrealidad no altera el tiempo sino que disminuye la velocidad máxima acercandose al kelvin absoluto, ya que la energía al ser estirada se vuelve más lenta, y por consiguiente el movimiento, por lo que solo sería una masa infinita del volumen limitado con deformidad
de espacio y energía no de tiempo.

Reply
Jorge Andrés agosto 6, 2015 - 10:06 pm

¡Qué buena entrada, Jordi! Lo de que las longitudes de onda también se estiran y comprimen es algo en lo que nunca me había detenido a pensar, por entradas como ésta es que amo Ciencia de Sofá.

Reply
Andrés agosto 11, 2015 - 10:27 pm

Hola a todos,

Hay un concepto que no termino de entender y que se repite en varias entradas del blog..

En esta entrada se habla de que la atracción gravitacional del agujero negro hace que todo lo que se acerca a menos de una cierta distancia caiga en su interior, incluso la luz. También se habla de que la longitud de onda de la luz se deforma con la proximidad al agujero negro. ¿Implica esto que la luz tiene masa?

Este concepto me confunde ya que en otra entrada del blog (creo que era en la que hablas de los viajes en el tiempo) se dice que ningún objeto con masa puede llegar a viajar a la velocidad de la luz..

Si alguien es tan amable de dejar unas lineas que me aclaren el concepto lo agradecería enormemente.

Gracias!

Reply
Albert agosto 24, 2015 - 11:50 am

Sobre el último comentario. Aunque parezca raro (que lo es), ambas afirmaciones son ciertas.

Hay dos definiciones distintas para la masa, la de que provoca y es afectada por la gravedad (masa gravitacional) y la que dificulta la aceleración (F=m·a) (masa inercial). Parece ser que en los objetos normales la masa parece ser la misma en los dos casos, así que simplificamos y le llamamos masa, pero no es así para los fotones, que solo tienen masa gravitacional.

Añado otra duda: entiendo que un agujero negro es un objeto con tanta masa cuya velocidad de escape es superior que la de la luz (llámemosla masa M). Por aquí, ningún problema. La duda que tengo es en su creación, si proviene de una estrella, esa estrella ya tendría que tener esa masa M, por lo que ya sería un agujero negro por definición. No se si ha quedado claro, si no hay interferencias externas, como puede ser que la estrella anterior al agujero negro, tenga la misma masa que el agujero negro, pero no sea uno?

Reply
Albert agosto 25, 2015 - 11:29 am

Ya he visto la respuesta a mi pregunta en otro apartado https://cienciadesofa.com/2014/09/respuestas-li-que-pasa-cuando-dos-agujeros-negros-chocan.html

Gran blog!

Reply
xisco agosto 26, 2015 - 2:02 pm

La singularidad yo creo que es una esfera compacta súperpesada y con súperdensidad. Simplemente llegarías a ella para formar parte de ella. Tus átomos se transformarían en una pasta de neutrones y luego quien sabe. El tiempo se paralizaría allí dentro mientras fuera del agujero los eones pasarían como segundos.

Reply
Salk agosto 27, 2015 - 1:52 pm

Si se lograse aclarar por un lado la relación entre gravedad y tiempo, y por otro la energía nuclear a nivel cuántico con el tiempo, tal vez se podría encontrar la relación entre gravedad y energía nuclear a partir del tiempo…

Reply
Raulete julio 3, 2016 - 8:05 pm

Artículo hiperinteresante. Muchas gracias.

Tras analizar exhaustivamente todas vuestras afirmaciones vertidas y habiendo contrastado todas las fuentes referenciadas, me asalta una duda que espero seáis capaces de resolverme.

Sin más dilación, procedo:

¿Si lanzo, hasta alcanzar las inmediaciones de un agujero negro unos macarrones también se espaguetificarían?

Muchas gracias.

Reply
Jordi Pereyra julio 6, 2016 - 9:48 am

¿Cómo creías que fabricaban los bucatini? https://en.wikipedia.org/wiki/Bucatini

Reply
Josef octubre 14, 2016 - 9:49 pm

Me gusta pensar que la gravedad de un agujero negro no es infinita, sino que tiende al infinito. Al absorber materia, va aumentando su masa; consecuentemente, aumenta su atracción gravitatoria. Esto hace que se expanda su horizonte de sucesos, lo que lleva a una mayor atracción, y ganancia de masa. Un bucle que no hace más que crecer. El infinito no puede crecer. Pero algo que tiende al infinito, sí.

Reply
Beto Gutierrez diciembre 16, 2016 - 12:12 pm

Excelente articulo!!!

Reply
Los pequeños detalles que hacen la diferencia - El blog de Alejandro julio 11, 2017 - 4:25 pm

[…] apocalípticas. Qué pasa si un agujero negro se acerca demasiado al sistema solar, o peor aún, si caemos en él. Al final terminamos todos pensando en la relatividad del tiempo cuando somos expuestos a las […]

Reply
Enrique Acevedo diciembre 9, 2018 - 9:05 pm

Una curiosidad, Si el universo está en constante expansión, es de lógica que los agujeros negros también. y si los agujeros negros están constantemente absorbiendo materia,¿sería posible que los agujeros negros fueran capaces de terminar por absorber la totalidad del universo?

Reply

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.