Hace poco escribía sobre la posibilidad de que existiera vida sin el sol. Hoy (en realidad, hace un par de semanas), Lucas Castro me ha planteado si podría existir vida sin la Luna.
Obviamente, los seres vivos no dependen de la Luna de la misma manera que lo hacen del sol: su superficie refleja un 12% de la luz solar que incide sobre ella y ni siquiera una parte considerable de esta cantidad llega hasta nosotros, lo que no es suficiente como para producir los procesos fotosintéticos que dan a las plantas su energía. Eso por no decir que la Luna ni siquiera nos proporciona calor.
Aunque es verdad que algunos animales dependen de las mareas provocadas por nuestro satélite (como los mejillones y otros moluscos) lo cierto es que, si de repente la Luna desapareciera (suponiendo que no ocurrieran catástrofes como las que más abajo explicamos), la inmensa mayoría de los organismos que habitan la Tierra seguirían con su vida tranquilamente. Tal vez un poco desorientados durante un tiempo, pero terminarían adaptándose.
de kilómetros de distancia. Crédito: NASA.